-Vivir, creo.
-Y todavía te haces el simpático.
-¡Ay! ¡Pará! Me tienes hasta la madre con tus disciplinas no conventuales, abuelo.
-Ni hablar sabes.
-Es un sudacaaztequismo.
Tiene razón mi preceptor. Papé moscas quince años. Bueno, cómo iba a saber. Iban y venían los viejos amigos y ni palabra soltaban -no a mí, a quien no tenían por qué, sino al país-. Vine a saber en esta década, háganme favor, y accidentalmente, cuando me enviaron a un encuentro subcontinental a hacer el pazguato.
¿Cómo precisar, entonces, si interpreto bien, prendido a Telesur, el único espacio confiable que encuentro, y con eso poco escuchado en mi trabajo, no importa cuánto platicara con Jorgi y estuviera atento a su paisana, la Ex candidata?
Ecuador, Bolivia, Chile, el fin de semana Argentina y Uruguay, y quizá un guiño brasileño, en tan diversas caras del mismo proceso.
Esperen, por casualidad encontré este video.
Mientras, con ingenuidad, quizás, espero que Sanders, Ocasio y compañeros hagan su tarea. Dos años atrás Chomsky y otros enviaron una carta abierta aquél: ¿Representa también un cambio en política armamentista (https://worldbeyondwar.org/bernie/?fbclid=IwAR10ZTipVJ2dIFsndfNd6xhPocKzN9Ha-agKjd6Vdyx39tKIbmubSXpfkn8)?
No importa cuánto rían de nosotros, abuelo. La revolución mundial va y con suerte asistimos al gran momento latinoamericano, del cual esta fuera México, ¿verdad, Obrador?, a quien imagino preguntarle.
-¿Y el subcontiente y el resto del mundo?
-No existen -respondería.
Pareciera que sudamérica da por anticuado el neoliberalismo y algo así se insinúa en este país. ¿Alucino? Hablo sólo de discursos, desde luego.
Inmanejable herencia nos dejaron con los cárteles, por otro lado. Un tipo que jamás sonó honesto aunque lo tengan como tal, asegura que en EU el manejo de drogas se reduce a solitarios brokers y pandillas. ¿Entonces la noticia, hace poco, sobre CIA, etcétera dominando su trasiego mundial?
-¿A qué viene eso?
-No sé, Belarmo. Estamos condenados a estar en casa informándonos. (Echa un ojo al pie de la nota, ¿sí?)
Ni así se suspende nuestro último viaje, hecho como haya manera, hacia pasado y presente. Deberé seguir yendo adonde es fuer, pues me unen lazos cada vez más indisolubles, así parezca perder el tiempo. ¿Estaré a tiempo?
-¿De qué? -dice mi abuelo por darme pie.
-Gracias.
-Hice una pregunta.
-Cuya respuesta conoces perfectamente. Tú la inculcas, a final de cuentas.
-Autista, te llaman.
-Solo yo escucho los gritos que escuché cuna adentro.
-Cada quien carga unos propios.
-No son míos sino tuyos.
-Reventaremos juntos, las tres personas del singular y plural.
-Así sea.
Se empieza por donde se debe, titulé sin motivo, y fui a dar con el verdadero monstruo, que no se llama crimen organizado sino informalidad. La economía del mundo gira en su torno. Drogas, prostitución forzada, armas, perfectamente imbricadas con grupos financieros, industrias, clases políticas.
No era Mike Douglas a quien teníamos que colocar en el agujero del conejo, Belarmo. Nicolas Cage como Yuri Orlov representa mucho mejor al personaje.
